jueves, 14 de marzo de 2013

El inglés, la guinda de nuestro pastel.


Europa quiere formar estudiantes que cuando salgan al extranjero puedan acceder a un puesto de trabajo y sepan desenvolverse sin problema. Pero esto en nuestro país es un reto para los universitarios españoles, dado el escaso desarrollo de las asignaturas de idiomas en el panorama educativo. Así que, al ser tan importante tener un nivel óptimo de inglés, debería optarse por ampliar las horas de la asignatura, realizar cursos para avanzar, en general, hacer algo para mejorarla lo máximo posible. En la actualidad, a pesar de que cuando llegamos a la Universidad llevamos un considerado número de años estudiando inglés, nunca estamos lo suficientemente preparados. 
Esto es un problema que debe resolverse a largo plazo, pero sin perder el tiempo y desaprovecharlo. España tiene el gran problema de que ha asumido muy tarde la necesidad de aprender inglés y es el país europeo con las tasas más bajas de nivel en este idioma. Se ha tardado mucho en reconocer la importancia de buscar soluciones ante este fracaso, pero si no solucionamos esto ya, va a seguirles pasando a nuestras futuras generaciones y no queremos eso, queremos una futura generación bien formada con un buen nivel de inglés. El conocimiento del inglés aumenta las posibilidades de encontrar más rápido un buen empleo. Hoy más que nunca resulta necesario aprender inglés, pues es uno de los idiomas más buscados por los empleadores con el francés y el alemán y el chino que también está adquiriendo protagonismo debido a las oportunidades de trabajo que genera el mercado en ese país.
Son estos los motivos para concientizarnos de la enorme importancia de estudiar y aprender el inglés, como una alternativa paralela a la carrera universitaria. 
Mª Carmen García

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